Las empresas apuestan por algo más que un buen salario para retener al talento y convencer a nuevos trabajadores. También se decantan por la retribución no monetaria que busca satisfacer determinadas necesidades personales, profesionales y familiares del empleado. A todo esto se le conoce como salario emocional, y en cierta medida permite mejorar la calidad de vida de las personas que integran una compañía.
Se busca motivar al trabajador y que mejore así su percepción sobre la empresa. No se trata solamente de recibir una elevada nómina todos los meses, también entran en juego otro tipo de cuestiones como una serie de beneficios que contribuyan al desarrollo personal y profesional. Es importante que el empleado note que sus expectativas se encuentren cubiertas y que exista una estabilidad dentro de la entidad.
Todo ello resultará de gran valor para mantener en la plantilla al talento y evitar la rotación, que siempre acaba resultando contraproducente.
Uno de los detalles que más aprecia el trabajador en cuanto a salario emocional es la conciliación familiar y laboral. Eso ayudará a aumentar su motivación, y permitirá que sea mucho más productivo en su labor.
Los beneficios del salario emocional para las empresas
Las empresas deben tener muy presente en sus planes la inclusión del salario emocional. Los beneficios que le aportará son el aumento de la productividad de los profesionales, el mayor sentimiento de pertenencia e implicación por parte de los trabajadores, la fidelización por parte de estos, mejora del ambiente laboral, atracción de talento y disminución de la rotación del equipo.
Para que en realidad resulte atractivo, el salario emocional debe ser percibido por la plantilla como algo de valor, que esté a la altura de un incremento del sueldo. En cualquier caso, debe quedar claro que se trata de un complemento de la retribución y en ningún momento tendrán consideración de sustitutivo.
También resultará de gran ayuda para disminuir el absentismo laboral, rebajando la sensación de infravaloración, frustración o insatisfacción. Al cabo del año se producirán menos bajas laborales y retrasos. Por medio de estas herramientas las compañías tienen la posibilidad de conseguir un mayor compromiso por parte de su plantilla.
Las ventajas del salario emocional para los trabajadores
Una adecuada retribución contribuye a que un trabajador esté muy satisfecho en su puesto, aunque no es la única solución que deben buscar las empresas. Además del dinero, también se le puede compensar por su trabajo con el salario emocional.
Cuando el empleado percibe que se reconoce su labor y se preocupan de sus necesidades personales, acabará con una mayor motivación e incrementará su compromiso. Es importante que haya una apuesta por la conciliación de la vida familiar con la profesional, y para ello desempeñan una labor muy importante la flexibilidad de horarios o beneficios sociales como el pago de guarderías.
Por último, otro de los beneficios del salario emocional sería la formación y la puesta en marcha de iniciativas que le permitan adquirir nuevas capacidades que ayuden a su desarrollo y crecimiento, tanto profesional como personal.
Clases de salario emocional
Con el salario emocional se persigue algo más que cuidar el sueldo del empleado. Pretende fomentar su bienestar y la conciliación. Las nuevas generaciones se sienten atraídas por algo más que dinero, de ahí que valoran mucho las herramientas que ponen en marcha las empresas para que el trabajador se encuentre a gusto. Entre los tipos de salario emocional más comunes están los siguientes:
- Teletrabajo: el trabajador agradecerá no tener que acudir hasta la oficina y de esta manera realizar sus funciones desde su casa o cualquier sitio en el que se encuentre. Ahorrará mucho tiempo en desplazamientos y esos minutos que se evita a diario podrá dedicarlos a la familia o a sus aficiones.
- Flexibilidad horaria: es otro de los puntos del salario emocional que más valoran los trabajadores. Tendrán la posibilidad de adaptarse mucho mejor a las necesidades personales y familiares del día a día.
- Beneficios sociales: entre las propuestas más frecuentes se encuentran el ticket guardería, el pago del transporte público u ofrecer clases de idiomas.
- Posibilidad de desarrollo dentro de la compañía: es importante que un profesional se sienta motivado dentro de una empresa. A todo el mundo le gusta prosperar y sentirse importante en un negocio. Hay que ofrecer todos los medios posibles para que puedan adquirir nuevos conceptos, se sientan más válidos y se les abran más oportunidades laborales en la misma compañía.
- Propuestas de salud laboral: nunca está de más ofertar cursos de hábitos de alimentación, instalar material ergonómico para los empleados, cestas de frutas o bonificaciones para acudir a instalaciones deportivas.
Mejorar ambiente laboral: es Es necesario poner en marcha actividades que contribuyan a incrementar la sensación de pertenencia al grupo. Pueden ser a través de excursiones, actividades divertidas o con zonas de esparcimiento en la propia oficina.
